Pablo González me formula la siguiente crítica: “Creo que es profundamente erróneo presentar al socialismo como una economía mixta, porque da la sensación que el socialismo es una cosa que se encuentra a mitad de camino entre el Estado y el Mercado, acercándose peligrosamente a concepciones socialdemócratas, dejando de lado la dialéctica de la historia”. La cuestión es saber si lo que afirmo es verdadero o falso, no si soy comunista o socialdemócrata. Y los socialdemócratas pueden decir verdades y los comunistas falsedades. La verdad no depende de la fuerza política a la que se pertenezca, sino de si lo que se afirma concuerda con los hechos o no.