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viernes, 18 de junio de 2010

Lo lejano y lo inmediato

Los intelectuales, y esto es algo que aprendí de Ilích Ulianov, nos apercibimos de la realidad de manera tortuosa, la gente sencilla, la gente sin especial preparación teórica, se aperciben de la realidad de manera directa.
Así que por gente sencilla entiendo aquí la gente que no tiene una especial formación teórica -como sí la tenemos los que pertenecemos a este foro-, y perciben la realidad sin grandes complejidades.

Veamos ahora la relación entre lo lejano y lo inmediato, entre lo general y lo particular. ¿Cuál es tu vida inmediata? La relación que mantienes con tu cama cuando duermes, con la mesa en la que comes y los alimentos con  que desayunas, con el transporte que usas, con las personas con las que hablas y compartes cosas prácticas, y todo lo que de una manera u otra tiene que ver directamente con tu vida práctica. Forma parte también  de la vida inmediata ir a un banco a comprar un crédito, ir a una inmobiliaria a comprar una casa, la casa que compras y en la que vives, los muebles que compras y luego usas. Todo eso es la vida inmediata y lo que representa lo cercano.

¿Qué es lo general? De lo que nos ocupamos mayoritariamente en este foro. Hablamos del dinero, del valor, del valor de uso, del interés, de la tasa de cambio, del mercado de divisas, de la deuda pública, de la transformación de los valores en precios de producción. Es decir, hablamos y debatimos fundamentalmente sobre conceptos.

Creo que es bueno estar educados en el conocimiento de lo general. La ciencia no es posible sino de ese modo. Pero es conveniente vivir y sentir lo que ocurre en lo particular. Y lo que yo propongo es que todos esos conocimientos que tenemos de lo general sepamos integrarlo en lo particular, esto es, en la práctica. Era Mao Zedong quien decía que había que integrar la verdad universal del marxismo en la experiencia particular de China.

¿Y qué pretendo cuando hablo de que hay que vincular o unir lo cercano con lo lejano? Lo lejano es lo que ocurre en el mundo de la Bolsa, en los mercados de valores, donde, por ejemplo, los especuladores atacan a la economía española. Y lo cercano es lo que ocurre cuando una persona pide una prestación por desempleo y no se la dan o cuando le suben el tipo de interés y su economía no puede soportarlo. Lo que yo propongo es que las vanguardias teóricas produzcan ideas que sirvan para acercar esos dos mundos.

12 de marzo de 2010.

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