En la última reunión del CEKAM estudiamos los dos
primeros capítulos de La imaginación y el
arte en la infancia de Vygotsky. Aprendimos
algunas nociones que paso a exponerles. El concepto popular de imaginación o
fantasía no coincide con el concepto de imaginación o fantasía en psicología. Cuando
en la psicología popular se habla de una persona fantasiosa, se suele entender
por ello a una persona que no tiene los pies en la tierra, a una persona que le
da la espalda a la realidad y no se enfrenta a la vida tal cual es. Los padres
procuran que sus hijos, con el fin de que se labren un porvenir en el futuro, no
se llenen la cabeza de fantasías e ilusiones vanas.
¡Aviso importante! Hasta ahora cuando se pinchaba en las etiquetas no aparecían todos los trabajos publicados bajo dicha etiqueta. Ahora hay paginación y se puede acceder a todos los trabajos publicados. Otra cuestión: Soy Ingeniero Técnico y Licenciado en Filosofía, pero de forma general me considero un Investigador Independiente.
Translate
domingo, 30 de diciembre de 2012
sábado, 29 de diciembre de 2012
Una parada y un cambio de rumbo
Hoy he empezado a escribir esta reflexión sin
ponerle aún un título. Se lo pondré al
final aunque ustedes lo lean al principio. Llevo algún tiempo sin publicar. Me
sentía saturado por todo lo que tiene que ver con la economía. La repetición de
las mismas ideas sobre la crisis me genera un cierto aburrimiento intelectual.
Se vuelven las cosas de color gris y el estímulo para pensar decae
estrepitosamente. Se desciende en el nivel intelectual y sobreviene el
descontento. Pero ante estas situaciones reacciono con premura: cambio de
tercio. Me refugié en principio en una obra de Vygotsky: La imaginación y el arte en la infancia. Me recuperé un poco. Luego
salté a una obra de Jerome Bruner: Actos
de significado. De ahí, y porque Jerome Bruner lo citaba, pasé a una obra
de John Dewey: El arte como experiencia.
Ya me sentí más liberado. Recuperé el tono intelectual. Y desde ahí he saltado
a una obra de Roger Fry: Cézanne: un
estudio de su evolución. Ya empiezo a estar contento. Estoy estudiando con
más ritmo y nuevas ideas me afluyen a la mente. Me he hecho con más textos,
siempre quiero disponer de todos los textos que necesito, todo autor que leo
hace referencia a otros autores que me llaman la curiosidad y el interés. Tengo
en lisa los siguientes textos: Diario de
un bebé de Daniel N. Stern; La
elaboración del sentido de varios autores; Realidad mental y mundos posibles de Jerome Bruner; La víspera de Santa Inés de John Keats;
y Giotto de Roger Fry. Y tengo en mi
libreta más anotaciones de nuevos libros que quiero comprar. Amo a los libros.
Son mi vida. Quiero reflexionar en estas próximas semanas sobre filosofía del
arte y sobre psicología del
conocimiento. No sé cuánto durará este cambio de rumbo. Tampoco me importa. Para
mí lo importante es trazar siempre metas y objetivos; pero si después de haber
planeado todas las metas tengo que cambiar al día siguiente de rumbo, lo hago
sin sombra de duda. Ilích Ulianov tenía una gran destreza en los cambios de
rumbos si la situación así lo exigía.
jueves, 6 de diciembre de 2012
¿Crean los bancos dinero de la nada?
Breve introducción
Me resulta sorprendente que haya personas que
presenten la banca de la reserva fraccionaria como causa básica de las crisis
económicas y que afirmen que por ese medio los bancos crean dinero de la nada. Algunos
son más precisos cuando afirman que los
bancos crean dinero al conceder crédito. Y más sorprendente me parece aún que
se defienda que la reserva de los bancos deba ser equivalente a la de los
depósitos. Esto es, que se impida a los bancos usar los depósitos como préstamos.
Creo que en todos estos análisis de se pierde de vista lo principal: el dinero
no es un simple papel sino la forma transfigurada de la mercancía. No permitir
que el ahorro social se emplee como préstamo, equivale a impedir que con el
trabajo excedente se cree nueva riqueza y nuevos puestos de trabajo. Se
frenaría el crecimiento económico o el crecimiento económico quedaría muy por
debajo de sus posibilidades. Se incurriría en el mismo error que las economías
planificadas del socialismo antiguo: se generaría la escasez.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)