“Como siempre, ante la crisis entre los marxistas aparecen dos posiciones: los que piensan que la crisis se debió a las contradicciones esenciales del capital y los que piensan que la crisis se debió a la avaricia de los especuladores, o a que el Estado no ha intervenido lo suficiente, etc. Son dos enfoques opuestos, muy difíciles de conciliar”.
Las causas esenciales no son las únicas causas, hay un sinfín de causas y entre ellas también están las causas aparentes. Sin duda que un mercado capitalista regulado es mejor que un mercado capitalista desregulado. Sustantivamente sigue siendo un mercado capitalista, pero predicativamente son diferentes. Y los predicados, sean atributos o accidentes, son en ocasiones decisivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario