“Una aclaración: cuando hablo de "conciencia de clase", lo hago en el sentido que empleaba el término Lenin: tener conciencia del carácter irreconciliable del enfrentamiento entre el capital y el trabajo”.
Esta es una definición de conciencia de clase, en parte, muy unilateral, y en parte, muy afectada por la lucha de clases. Hasta hace poco se quejaban en este foro de los excesos cometidos en la lucha de clases librada en la revolución soviética, y ahora se formula un concepto de conciencia de clase extremadamente afectado por la lucha de clases. Tener conciencia de clase obrera en la actualidad, y aún en tiempos de Lenin, es tener conciencia de un sinfín de cosas. Conciencia es igual a saber. Conciencia es la que representaba Lenin en sus escritos teóricos; y sus escritos teóricos se contienen en más de 40 voluminosos tomos.
Como creo que esto es un tema importante, expondré una serie de ideas a este respecto de forma enumerada:
Uno. La experiencia ha demostrado que la transformación del capitalismo en socialismo es sumamente compleja y de largo desarrollo. No es una cuestión que se resuelve de la noche a la mañana ni puede delinearse con cuatro frases.
Segundo. La transformación del capitalismo en socialismo supone y supondrá un proceso de transición donde, además de elementos del socialismo, habrá muchos elementos mercantiles y capitalistas.
Tercero. El Estado socialista seguirá siendo en parte un Estado de derecho, donde se aseguren los derechos del individuo frente al Estado y el partido gobernante. Será esta una herencia burguesa necesaria.
Cuarto. La vida de Lenin en tanto dirigente del partido bolchevique estuvo afectada en el noventa por ciento por la lucha de clases. De ahí que buena parte de sus textos teóricos reflejaran esa situación: una lucha de clases abierta y cruenta.
Quinto. Con la “Nueva Economía Política” Lenin dio firmes pasos atrás en la construcción del socialismo soviético: defendió la necesidad para la economía soviética de la producción mercantil, del capitalismo de Estado y de ciertos grados del capitalismo privado.
Sexto. La conciencia de clase no puede estar alimentada sólo de lucha de clases, también debe estar alimentada de la lucha por la producción. Y esta lucha es más importante que aquella y es en el ámbito de esta lucha donde el socialismo soviético recibió sus más importantes reveses. Uno de los rasgos de los partidos de la extrema izquierda, que en su momento se reconocían como partidos marxistas leninistas, trotskistas y marxistas leninistas pensamiento Mao Zedong, era justamente que exageraban el papel de la lucha de clases en la historia.
Séptimo. La exageración de la lucha de clases, tal vez la principal enfermedad ideológica que padeció Stalin, supone ver el enemigo en todas partes, incluso en las propias filas de los partidos comunistas. De ahí igualmente la enfermedad del sectarismo que todavía padecen muchísimos marxistas.
Octavo. Si en el socialismo todavía habrá burguesía y pequeña burguesía, será necesario, al menos que los comunistas quieran liquidarlas física y espiritualmente, que esas clases sociales tengan el derecho de constituirse en partidos políticos y ocupar sus correspondientes escaños en el parlamento.
Noveno. Entre las clases no sólo hay lucha, también debe haber colaboración. Los frentes amplios y los frentes únicos, que pertenecen a la experiencia del movimiento comunista internacional, suponen acuerdos y pactos entre clases distintas.
Décimo. Entre las clases no sólo hay guerra, también hay paz. Y. por supuesto, también hay conciliación.
Undécimo. Es un error y en parte una injusticia atribuirle a Lenin un concepto de conciencia de clase tan unilateral y belicista como el expuesto por Rolando Astarita.
Duodécimo. Es necesario modernizar el lenguaje de los marxistas y adaptarlo a los tiempos actuales. La gran debilidad de las vanguardias marxistas actuales es su incapacidad para conectar con las grandes masas sociales.
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